Voto Inmaculista


JURAMENTO Y VOTO PUBLICOS DE CREER, CONFESAR Y DEFENDER EL DOGMA DE LA INMACULADA CONCEPCION DE LA SANTISIMA VIRGEN MARIA

En el nombre de la Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, tres personas, y un solo y verdadero Dios Todopoderoso, y en de Dios hecho Hombre, nuestro Redentor y Señor Jesucristo, a quien adoramos real y verdaderamente presente en el Augusto Sacramento de la Eucaristía; en presencia de todos los que nos escuchan y a la faz de todo el mundo entero, decimos:

Notorio y público sea que nosotros, la Ilustre y Venerable Cofradía Sacramental de Nuestra Señora de las Angustias y el Santísimo Cristo de la Buena Muerte de El Ejido, en la provincia de Almería, nos reunimos para celebrar con toda solemnidad, el 150 aniversario de este día consagrado por la Santa Madre Iglesia, en el dogma que Su Santidad el Papa Pío IX promulgó en la bula “Ineffabilis Deus” el día 8 de diciembre del año 1854, sobre la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María; y observando pues, el carácter inmaculista que desde sus inicios impregna a nuestra hermandad, de todo corazón hacemos colectivamente y de modo unánime, como hijos fidelísimos de la Santa Madre Iglesia Católica Apostólica y Romana, en la presencia de Dios Nuestro Señor, y ante las Sagradas Imágenes Titulares de nuestra Cofradía: SOLEMNE VOTO Y JURAMENTO DE CREER, CONFESAR y DEFENDER, que la SANTISIMA VIRGEN MARIA MADRE DE DIOS, por un privilegio especial del Altísimo, atendiendo a los méritos previstos de su Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, fue preservada de la culpa original que todos contraemos al nacer.

Declaramos que, como católicos, apostólicos y romanos, creemos en todos los Misterios que Nuestra Madre la Iglesia nos propone, muy especialmente en este de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María. AFIRMAMOS, CREEMOS y CONFESAMOS, que la Santísima Virgen María fue, en virtud de los méritos de su Hijo, Nuestro Redentor, preservada desde el primer instante de su Bendita Concepción de toda mancha de Pecado Original. También confesamos, afirmamos y creemos que la Excelsa Señora, Madre de Dios y Madre Nuestra, terminado el curso de su vida temporal, fue llevada en cuerpo y alma a los Cielos; así bendecimos su Inmaculada Concepción, proclamamos su Gloriosa Asunción,  honramos su Sacrosanta Virginidad y alabamos su total Ausencia de Pecado.

Hacemos así, Solemne Voto y Juramento de CREER, CONFESAR Y DEFENDER hasta la muerte, los misterios de la Mediación Universal de la Santísima Virgen en la dispensación de todas las gracias, y de su realeza Universal como Madre de Dios y Corredentora del género humano, ofreciendo, solemnemente, homenaje al Corazón Inmaculado de la Virgen Purísima en perpetua y total entrega de amorosa y filial servidumbre.

¡Oh, Benignísima Señora y Madre nuestra Dulcísima!, admitid estos nuestros votos y juramentos, amén de nuestro tributo, como muestra del filial amor que os profesamos y, en retorno, conseguid que, cubiertos con el manto de vuestra protección a la sombra del árbol Santo de la Cruz, participemos de sus frutos en la tierra, recibiendo abundantes gracias para ejercitar las virtudes, y después, por medio de ellas, subamos a la gloria para unirnos con Vos para siempre y juntos ver a Dios, amarle, gozarle y alabarle por toda la eternidad.

¡Oh, Santísima Virgen María Inmaculada, Reina de los Cielos!, en tus advocaciones de la Paz, de las Angustias y del Pilar, te rogamos que intercedas ante tu Divino Hijo, Cristo Jesús en su Buena Muerte, para que Este nos auxilie en nuestras miserias terrenales, ayudándonos a guardar la Fe que hemos recibido de nuestros padres y que ahora, solemnemente proclamamos, esperando morir en ella, y por la Divina Misericordia de Dios y por Tu intersección, gozar algún día de las delicias inefables de la Gloria. Que así sea.

En el nombre de la Junta de Gobierno y del Cabildo General de la Cofradía, por mandato y a quienes por derecho representamos, decimos:

ASI LO CREEMOS.                         ASI LO CREEMOS.                                ASI LO ESPERAMOS.

Este juramento se hace en presencia de la asamblea de fieles, y de Nuestro Párroco y Consiliario de la Cofradía, en quien reconocemos al pastor que ha de cuidar la integridad de la Fe, de las costumbres y del mantenimiento de la disciplina de la Iglesia, en solemne declaración de comunión, respeto y filial obediencia a la Santa Madre Iglesia Católica, Apostólica y Romana, a Su Santidad el Papa y al Obispo de la Diócesis de Almería.

Dado en El Ejido, en el octavo día del duodécimo mes del año de Nuestro Señor de dos mil cuatro, festividad de la Inmaculada Concepción.

Así lo rubrico por mandato expreso, dando fe de todo lo dicho.